Estimado vecino, estimada vecina.

Me dirijo a usted porque tiene un comercio y es de todos conocidos la seria crisis que desde hace años atraviesa el sector en Alcalá.

Permitanos compartir con usted unas reflexiones sobre los orígenes y las circunstancias de esta crisis, que tiene unas causas y unos responsables.

Primero, las crisis no son como la lluvia, no caen del cielo sin más. Son fruto de las buenas o malas decisiones que tomamos las personas, muy especialmente de aquellos que tienen el poder de aprobar leyes y normas, sea en el estado, o en el gobierno de un municipio.

Segundo, unos elementales hechos económicos: el comercio local se sostiene gracias al consumo de los ciudadanos de nuestra ciudad y depende del dinero que tengan.

Vamos a llamar la Tarta de Alcalá a la suma de los dineros netos que ingresan todos los ciudadanos de nuestra ciudad. Según las declaraciones de la Renta del año 2015, los vecinos de Alcalá obtuvieron unas rentas netas de 422.252.426 euros. Si le restamos el dinero que ahorran, y le sumamos el dinero “negro” de la economía sumergida (un 15%), obtenemos, aproximadamente, lo que las personas tienen y pueden gastar. Redondeando, las familias de Alcalá tienen para sus gastos en un año: 450.000.000 millones de euros, y esa es la Tarta de Alcalá

Y por una porción de esa tarta compiten todos los comercios de bienes y servicios, de manera que si uno de esos servicios se lleva una porción muy grande, los demás se tienen que conformar con lo que queda.

Y exactamente eso es lo que está pasando. En efecto, los gastos de vivienda (sean hipotecas o alquileres) de nuestros ciudadanos representan, en promedio, entre el 35% y el 45% de la tarta.

Las familias de rentas bajas gastan incluso más del 45% de sus ingresos en pagar sus viviendas, las

de rentas altas, sobre el 30%.

Es decir, si los gastos de vivienda se llevan el 40% de la Tarta (180 millones), queda un 60% de la Tarta (270 millones) para el resto de gastos familiares: vestidos, calzados, alimentación, ocio, libros, teléfonos, coches, tv, gasolina, seguros, viajes, regalos, fiestas, y un largo etcétera.

Ahora, imagine que conseguimos reducir el gasto para viviendas en un 5%. Parece poco, pero no lo es, porque hablamos de 22 millones de euros, que las familias se ahorrarían del pago de las viviendas y se lo gastarían en el comercio.

Veamos un cálculo real sobre lo que se puede comprar con esos 22 millones de euros :

• 7.333.000 kilos de fruta a 3 € el kilo…

• 1.100 coches de 20.000 € cada uno.

• 4.400.000 kilos de boquerones a 5€ el kilo.

• 73.300 teléfonos móviles a 300€ cada uno.

• o bien… 3.600.000 cervezas con tapa, a 6 euros la convidá.

Nada de esto es nuevo. En los momentos más duros de la crisis de 2008 con la burbuja inmobiliaria, se empezaron a rescatar bancos, muchos expertos advirtieron sobre el mal camino elegido, y uno de ellos lo expresó claramente con estas palabras:

“Si queréis superar la crisis no le deis el dinero a los bancos, dadselo a la gente, que se lo gastarán, el comercio venderá más, las fábricas tendrán que producir más para abastecer al comercio, incluso los bancos podrán dar más prestamos, el paro disminuirá, la gente sufrirá menos y la economía mejorará…” Por cierto, el economista, autor de estas palabras es Joseph Eugene Stiglitz. Premio Nobel de Economía. Año 2.001.

Es lícito preguntarse: ¿Por qué los gobiernos se convierten en apoyo de los grandes financieros? y no de la gente. En el caso de Alcalá, la especulación, amparada desde el gobierno municipal, que han sido los cómplices necesarios, al estar durante decenios sin cumplir las leyes del suelo, han provocado los altos precios de las viviendas, ahogando al comercio, al llevarse la vivienda un trozo de Tarta tan desproporcionado.

La otra gran causa de la crisis del comercio es el enorme número de super e hiper de todas clases, que hacen una competencia desleal, y poco sostenible.

Desde la coalición Adelante Alcalá de Guadaíra, con nuestra independencia de criterios y nuestra completa desligación de los especuladores y empresas multinacionales de la distribución, afirmamos que la mejor forma de disminuir la crisis del comercio es simple, pero no sencilla.

• Desde mañana mismo: moratoria de más hiper y super de las multinacionales de la distribución, y desde luego de cualquier gran comercio que obligue a ir en coche. No es sostenible y es un grave peso para el cambio climático.

• Desde mañana mismo: Promover el comercio de cercanía, incluso con bonificaciones de impuestos, favoreciendo su asentamiento en los barrios, porque consume menos energía al necesitar menos transporte, y así hacemos una sociedad más sostenible.

• A medio plazo. Ir disminuyendo la enorme porción de Tarta que se llevan los gastos en viviendas, aplicando las leyes del suelo, eso abarataría los precios de las viviendas, y los alquileres. La gente dispondrá de más dinero, y lo gastará, y el comercio mejorará.

Alcalá está en una encrucijada, el comercio también. Y si los de siempre siguen gobernando no espere que hagan cosas distintas a lo que vienen haciendo desde 40 años atrás. El modelo de especulación seguirá, el comercio local no levantará cabeza, por muchas campañas de papeles que peguen en nuestros escaparates. Pero si decide apoyar una nueva manera de gestión, centrada en las necesidades de la ciudadanía y no en los grandes intereses especuladores, estará impulsando un nuevo modelo de desarrollo, más sostenible, más cercano y menos dependiente de los grandes empresas.

En sus manos está si continúa la lenta decadencia del comercio, o actuando en defensa de sus intereses, considera que ha llegado el momento de emprender otro camino, más sostenible y menos dependiente de los grandes empresas. Y a eso nos ofrecemos desde Adelante Alcalá de Guadaíra.

Ahora usted debe decidir.

Atentamente. María José Lera.

Independiente y candidata a la alcaldía.